Si la reflexión sobre el pluralismo sólo puede hacerse como invocación, llamado, reconocimiento e inclusión del otro ausente, debe asimismo desarrollarse sobre la base de las plurisémicas acepciones del término pluralismo y a partir de la experiencia del hacerse presente en el mundo, en virtud de una actitud de vigilancia que abre el camino de otra forma de concebir la actividad del filósofo en cuanto pensamiento itinerante. Ésta es la razón por la cual la reflexión sobre el pluralismo precisa, por parte del filósofo, de una radical y vital experiencia de apertura, como también de descentramiento, desarraigo y desinmunización, es decir, de un pensamiento que se rehúsa a toda forma de purismo y actitud ideocrática y autorreferencial, con res...