Relación entre el comportamiento de rechazo a la escuela y el funcionamiento social: un enfoque de análisis de clúster

On the basis of the heterogeneous casuistry that characterizes the students who refuse going to school, it is useful to have a classification of this population in homogeneous groups. For this, the aim of this study was, first, to identify by cluster analysis the profiles of school refusal behavior based on the functional model evaluated through the School Refusal Assessment Scale-Revised (SRAS-S). Secondly, it is intended to analyze if there are differences in social functioning scores according to the school refusal profiles identified. This study involved 1212 Spanish children between 8 and 11 years old (M=9.12, SD=1.05) who completed the SRAS-R to evaluate the school refusal behavior and the Child and Adolescent Social Adaptive Functioning Scale (CASAFS) to assess social functioning. Four profiles were identified: Non-school refusers, School refusers by mixed reinforcements, School refusers by tangible reinforcements and School refusers by negative reinforcements. The profile of Non-school refusers achieved the highest average scores in social functioning, while School refusers by mixed reinforcements group obtained the lowest average scores in social functioning. In general, the profiles found support the clusters identified in previous studies. The implications of social functioning on school refusal behavior are discussed.Partiendo de la heterogénea casuística que caracteriza a los estudiantes que rechazan la escuela, resulta útil disponer de una clasificación de esta población en conjuntos homogéneos. Para ello, el objetivo de este estudio fue, en primer lugar, identificar mediante análisis clúster los perfiles de estudiantes que rechazan la escuela en base al modelo funcional evaluado a través de la School Refusal Assessment Scale-Revised (SRAS-S). En segundo lugar, se pretende analizar si existen diferencias en las puntuaciones de funcionamiento social en función del perfil de estudiante que rechaza la escuela. En este estudio participaron 1212 niños españoles entre 8 y 11 años (M=9.12; DE=1.05) quienes cumplimentaron la SRAS-R para evaluar el rechazo escolar y la Child and Adolescent Social Adaptive Functioning Scale (CASAFS) para evaluar el funcionamiento social. Fueron cuatro los perfiles identificados: No rechazo escolar, Rechazo escolar por reforzamiento mixto, Rechazo escolar por refuerzos tangibles y Rechazo escolar por reforzamiento negativo. El perfil de No rechazo escolar alcanzó las puntuaciones medias más altas en funcionamiento social, mientras que el perfil de Rechazo escolar por reforzamiento mixto obtuvo las puntuaciones medias más bajas en funcionamiento social. En general, los perfiles hallados apoyan los clústeres identificados en estudios previos. Las implicaciones del funcionamiento social sobre el rechazo escolar se discuten