I- LA TRANSCULTURACIÓNA mayor edad, menos acuerdo me asiste con esta forma de crítica para la cual el desenvolvimiento de nuestra literatura, en el tiempo, fue y es, una especie de idilio. Tengo para mí que la literatura colombiana nació del resplandor de una gran lucha, habida cuenta de que cronistas y poetas contribuyeron, como conquistadores también, a la destrucción de las civilizaciones indianas, y con estas, de su cultura. A la sombra del nuevo idioma y los modos nuevos, que surgen del alumbramiento de las fundaciones, lo indiano acaba por ser solo un recuerdo. Y cuando el aborigen canta, es para dolerse de los símbolos europeos de la invasión. Los testimomos escasean. Pero, ¿no es suficiente acaso con esta cuarteta