Add to ORKGEl jet del tiempo pasó con su lejano zumbido, redondeando años y décadas, y aquí me tienen frente a esta página en blanco para atender a un interno reclamo, sin lo cual la paz no sería conmigo. "Debes pagar esa deuda, me dice el sentimiento con claridad meridiana; ¿a qué esperar y aplazar, cuando la vida no da prendas para aplazamientos y esperas?"
En Colombia, son necesarios cambios a la actual legislación para que más que curativa, remedial o re...
Álbum de los adioses. Federico Díaz-Granados. Universidad Externado de Colombia, Colección Un libro ...
En Bogotá abundan los mendigos. En Buenos Aires también. En Bogotá hay muchos que además son locos, ...
El jet del tiempo pasó con su lejano zumbido, redondeando años y décadas, y aquí me tienen frente a ...
Por muerte del Ilmo. Señor Juan Bautista Sacristán acaecida el 1 de febrero de 1817, después de dos ...
Iba descalzo y tenía la cabeza rapada. Metió una mano en el bolsillo del pantalón y volvió a contar ...
Casa que respira. Samuel Jaramillo González. Estoraques Ediciones, Bogotá, 2002, 80 págs
La Sabana de Bogotá, así como los demás altiplanos fríos y algunos valles calientes de la Cordillera...
La cuarta batería. Gentes en menguante. Eduardo Zalamea Borda. Prólogo de Juan Gustavo Cobo Borda. T...
Demasiado terco para percibir el paso del tiempo, Alejandro Obregón ha logrado que su furiosa vitali...
Estaba sentado, entre el umbral y el patio, pensando en la lluvia. La lluvia, siempre la lluvia.Pero...
El esclarecido linaje de los Caros se halla tan entrañablemente vinculado a la historia de nuestra P...
El dulce camino del Darien. Crónicas de viaje. Jairo Osorio Gómez. Colección Biblioteca Popular de U...
Que mejor manera de evocar a la Santafé moribunda y a la Bogotá naciente que a través de la vida y l...
Arciniegas polémico. Sus más resonantes controversias. Espasa y Editorial Planeta. Colombiana. Bogot...
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