Su interior, que evidencia estar inacabado en la zona del crucero y capilla mayor, presenta una sola nave con cubierta de bóveda de medio cañón dividida en cuatro tramos por arcos fajones. El alzado presenta el esquema típico de iglesia de cajón, con amplísimas tribunas comunicadas entre sí. Su decoración de yeserías, de extraordinario efecto ornamental se concluyó en 1706. La Iglesia llama la atención por las palmeras que hay dentro de su patio y por tener la fachada más monumental de todo el barroco antequerano, realizada íntegramente en piedra de sillería, aunque, al igual que la cabecera en el interior del templo, no fue acabada y así se encuentra actualmente. A tener en cuenta el detalle de una hornacina situada en medio de una pilast...