La psicología iberoamericana: Retos para la visibilidad del conocimiento regional

Knowledge transfer involves the possibilities and actions related to creating, distributing and consuming knowledge in a certain area, not limited to traditional communication media, and specialised in optimising consumption channels and the breadth of the information (Echaverría Ezponda, 2008; Sebastián, 2007). These knowledge transfer processes are central to the production of knowledge, especially in those countries in which capacities have not been fully developed due to socioeconomic factors (Echaverría Ezponda, 2008; Macilwain, 2013). Even so, emerging economies such as Brazil, India, Russia and South Africa, for example, have no other alternative than to seek investment in building their own capacity to develop knowledge, since knowledge is vital to the development of their societies (“Capacity building: Architects of South American science,” 2014, “Stars of South American science.,” 2014; Van Noorden, 2014). Economic and social transformations depend, amongst other factors, on structural changes (socioeconomic, sociopolitical, socio-legal, socio-environmental and psychosocial) that necessarily imply changes in education, promotion and knowledge production systems. These are, in turn, linked to cooperation and knowledge transfer. Countries undergoing these dynamic processes are usually creating endogamic knowledge systems with low visibilities. This results in the omission by international indexing systems of the production from Latin America and other regions. (Alperin, 2014). Some of these changes involve investment on researcher training, economic support to production, knowledge transfer, creation of cooperation networks, interinstitutional agreements, and visibility of journal contents (Salazar-Acosta, Lucio-Arias, López-López, & Aguado-López, 2013). Brazil, for instance, has invested strongly on research, on its doctoral programme offer, on increasing publications—nowadays it is one of the countries that contribute the most to Psychology journals in the world (García-Martínez, Guerrero-Bote, & Moya-Anegón, 2012; Van Noorden, 2014). This exponential growth has been experienced by journals that have entered international indexes (Van Noorden, 2014). It is worth noting, though, that most journals only publish their own production, which has unfortunately generated endogamic practices that impair knowledge internationalistation, that is, they disallow visibility and knowledge transfer processes from including the developments and contributions of Brazilian Psychology into the wealth of international knowledge, and sometimes even into the regional incidence context; this is one challenge that an economy regarded as a main centre of science and cooperation in Iberoamerica (Van Noorden, 2014) will have to tackle. Conversely, in Colombia, ranked third in terms of number of journals contributed to international databases after Spain and Brazil, journals feature articles by a broader linguistic community, more so than national production. This is the Iberoamerican community. The quality of its journals and its exogamic practices have created journals that serve as scenarios for regional dialogue, and make it possible to speak of an IBEROAMERICAN PSYCHOLOGY. The Colombian journals that have gained coverage by international and regional databases such as PSYCINFO, Scopus, Web of Science, DOAJ, SciELO, Redalyc, amongst others, hold Iberoamerican knowledge. (Alperin, 2014). However, further visibility of regional knowledge is required before international Psychology acknowledges an emerging output that has influence not only in the Iberoamerican academic community, but also on over 400 million Spanish speakers. If we include Brazil, that number becomes 700 million, which is why understanding the dynamics and features of Iberoamerican Psychological production is critical. (Chinchilla-Rodríguez, Vargas-Quesada, Hassan-Montero, González-Molina, & Moya-Anegón, 2009; García-Martínez et al., 2012). Finally, it is clear that our communities have learned how to publish and are now learning to use that knowledge and express it in academic (research and citations, for example), professional (assessment and intervention practices) and social knowledge appropriation scenarios (García-Martínez, Guerrero-Bote, Hassan-Montero, & Moya-Anegón, 2009). These are long-term processes, that seem to be irreversible and independent of the supremacy currently held by Anglo-American Psychology. Iberoamerican Psychology is there and its development will surely depend on strengthening collaboration processes and on its visibilisation in the international context.Cuando se habla de transferencia de conocimiento se hace referencia a la capacidad y las acciones que se realizan para la creación, distribución y consumo del conocimiento en un área determinada, no limitada a los medios tradicionales de difusión y que se especializa en optimizar los canales de consumo y amplitud de información (Echaverría Ezponda, 2008; Sebastián, 2007). Estos procesos de transferencia de conocimiento son centrales en la producción de conocimiento en especial en países en los que las capacidades no se han desarrollado plenamente (Echaverría Ezponda, 2008; Macilwain, 2013), lugares en donde el proceso socioeconómico no ha permitido el desarrollo de estas capacidades en plenitud. Así, los denominados países con economías emergentes como Brasil, India, Rusia y Sur África por ejemplo, no tienen otra alternativa distinta a buscar invertir en construir capacidades propias para el desarrollo de conocimiento pues éste es vital para el desarrollo de sus sociedades (“Capacity building: Architects of South American science,” 2014, “Stars of South American science.,” 2014; Van Noorden, 2014). Las transformaciones económicas y sociales pasan entre otros aspectos por cambios estructurales (socioeconómicos, sociopolíticos, sociojurídicos, socioambientales y psicosociales) que implican necesariamente cambios en los sistemas de formación, promoción y producción de conocimiento, que a su vez están ligados a procesos de cooperación y transferencia de conocimiento. No obstante, inicialmente, los países que se encuentran en este tipo de dinámicas pasan por producir sistemas de conocimiento endogámicos y poco visibles. Esto repercute en que los sistemas de indexación internacional no solo omitan la producción en regiones como América Latina, sino que se desprecie una cantidad importante de producción (Alperin, 2014). Algunos de estos cambios implican invertir en la formación de investigadores, en el soporte económico a la producción, la transferencia de conocimiento, la generación de redes de cooperación, los convenios interinstitucionales y en la visibilidad del conocimiento que se produce, a partir de la publicación en especial en revistas (Salazar-Acosta, Lucio-Arias, López-López, & Aguado-López, 2013). Brasil, por ejemplo, ha desarrollado una fuerte inversión en investigación, en su oferta de formación doctoral, en el incremento de publicaciones ―hoy es uno de los mayores contribuyentes de artículos en el mundo en psicología― (García-Martínez, Guerrero-Bote, & Moya-Anegón, 2012; Van Noorden, 2014). Este crecimiento exponencial se ha venido dando en revistas que han además ingresado en los índices internacionales (Van Noorden, 2014). Es importante anotar, sin embargo, que la mayor parte de sus revistas solo publican la producción propia lo cual ha generado infortunadamente prácticas endogámicas que no producen la internacionalización de conocimiento, es decir, no permiten que los procesos de visibilidad y transferencia de conocimiento posibiliten que los desarrollos y contribuciones de la psicología brasileña puedan ser incorporadas al contexto internacional e incluso en sus ambientes de incidencia regional; seguramente esta será parte de la ruta que deberá emprender una economía que se considera epicentro de la ciencia y la cooperación en Iberoamérica (Van Noorden, 2014). En el tema del desarrollo de revistas en Colombia (el tercer país de Iberoamérica con más revistas en las bases de datos internacionales de Iberoamérica después de España y Brasil), por el contrario, se han desarrollado revistas que canalizan más que la producción nacional la producción de una comunidad lingüística más amplia: la iberoamericana. La calidad de sus revistas y sus prácticas exogámicas han convertido a las revistas en espacio de dialogo regional y estas permiten hoy hablar incluso de una PSICOLOGÍA IBEROAMERICANA. Las revistas colombianas que han ingresado a las bases de datos internacionales y regionales como PSYCINFO, SCOPUS, Web of Science, DOAJ, SCIELO, REDALYC entre otras, son depositarias de conocimiento iberoamericano en la disciplina (Alperin, 2014). Sin embargo, seguramente es necesario buscar visibilidad del conocimiento producido regionalmente para que sea más visible para la psicología internacional y que ésta considere la existencia de una producción emergente que no solo influye en la comunidad académica iberoamericana sino que seguramente esta terminará incidiendo en más de 400 millones de habitantes que hablan español. Adicional a esto, si incluyéramos a Brasil serían cerca de 700 millones de habitantes. Por lo tanto, es vital entender las características y dinámicas de la producción en psicología iberoamericana (Chinchilla-Rodríguez, Vargas-Quesada, Hassan-Montero, González-Molina, & Moya-Anegón, 2009; García-Martínez et al., 2012). Finalmente es claro que nuestras comunidades han aprendido a publicar y ahora están aprendiendo a usar ese conocimiento y expresarlo en apropiaciones académicas (investigación y citaciones, por ejemplo ) profesionales (prácticas de evaluación e intervención) y apropiaciones sociales del conocimiento (García-Martínez, Guerrero-Bote, Hassan-Montero, & Moya-Anegón, 2009). Estos procesos son evidentemente de largo plazo, sin embargo, hoy parecen irreversibles e independientes de la supremacía de la psicología generada por Estados Unidos o el Reino Unido. La psicología iberoamericana existe y su desarrollo dependerá seguramente de fortalecer los procesos de colaboración y a un tiempo de visibilizar la misma en el contexto internacional