Llegué a Antígona oriental de Marianella Morena y Volker Lösch a través de su asistenta de dirección, Luciana Lagisquet, quien me relató las vicisitudes de su creación y producción mientras caminábamos por una fría noche porteña de agosto del 2012. Morena, uruguaya, había contactado a Lösch -alemán cuya infancia transcurrió en Uruguay hasta que se produjo el golpe de estado de 1973- a través del instituto Goethe a inicios del 2009. Le había llamado la atención la técnica que se había constituido como la marca personal del director y dramaturgo, interesado en denunciar situaciones de injusticia social que se desarrollaban en su entorno. Él tomaba una obra canónica y la bombardeaba de la problemática a tratar entrelazando, por un lado...