Las prácticas funerarias proporcionan información relevante para el conocimiento de diversos aspectos culturales y antropofísicos, los cuales responden a interrogantes sobre la sociedad y la creencia religiosa que incide en un solo destinatario; el hombre vivo, individuo o comunidad “ya que todo enterramiento, aún el más simple, el más pobre, es un hecho social, y siempre será otra persona quien lo realice, siempre implica un acto social” (Andrés, 2003, p. 14). “Esta práctica socio-cultural especifica de los humanos, está caracterizada por un elaborado código simbólico, sobre la base que se constituye la realidad social” (Torres, 2006, p. 116) y la semiótica, que, por lo general, alude a aspectos religiosos que justifican que los ritos se d...