Con la publicación de Utopía en 1516, se inauguró un nuevo género, el relato utópico moderno, caracterizado por la descripción de sociedades o comunidades imaginarias donde sus habitantes disfrutaban de una vida armónica y placentera. Sin embargo, a través de sus páginas, la obra también permite establecer espacios de continuidad con las modernas lecturas distópicas: muchos de sus pasajes también nos inscriben en un mundo de tribulación y sufrimiento donde no parece haber lugar para la esperanza. A partir de esa constatación, este artículo reflexiona sobre el papel central que el humanista Moro va a conceder a la ficción como instrumento de emancipación y acción crítica al servicio del hombre cara a dar respuesta a las difíciles condiciones...