Ensayos clínicos con fármacos hipolipemiantes

La resinas, los fibratos y estatinas constituyen los fármacos hipolipemiantes utilizados en España con ensayos clínicos que demuestran una reducción de la morbilidad y mortalidad cardiovascular. Durante el año 2004 han aparecido dos estudios que comparan dos estatinas a distintas dosis. Las características de los pacientes incluidos en los estudios abarcan desde la prevención primaria de la enfermedad cardiovascular, diabetes, hipertensión arterial y ancianos hasta la prevención secundaria con enfermos afectos de cardiopatía isquémica o enfermedad cardiovascular. La reducción del colesterol de las lipoproteínas de baja densidad (cLDL) conseguida con estatinas está entre un 14% hasta un 43%. Las resinas y fibratos obtienen descensos inferiores al 10%. Estos afectan a los otros componentes del perfil lipídico aumentando las lipoproteínas de alta densidad (cHDL) y reduciendo los triglicéridos. El cLDL más bajo en el grupo control es 113 mg/dl y el más alto 198 mg/dl; mientras en el grupo intervención el cLDL más bajo es 82 mg/dl y el más alto 175 mg/dl. Los estudios que comparan dos estatinas ha distinta dosis presentan reducciones del 34,7% y 18,5% entre el grupo control e intervención. La demostración de la reducción del infarto de miocardio es el resultado más consistente de las estatinas y de los otros fármacos hipolipemiantes. Los estudios de prevención primaria obtienen un número necesario de pacientes a tratar (NNT) superior a 20 y los de prevención secundaria inferior a esta cifra. Algunos de los estudios de prevención primaria y secundaria han demostrado la prevención del ictus. El riesgo de ictus de los estudios con fármacos hipolipemiantes es más bajo que el de infarto de miocardio. El NNT más obtenido es de 30. Sólo algunos estudios de prevención secundaria han demostrado una reducción de la mortalidad total Los ensayos que comparan dos estatinas no reducen significativamente el número de infartos de miocardio, ictus o mortalidad total. Sólo cuando se asocian las diferentes enfermedades cardiovasculares los resultados son significativos. La utilización de dosis altas de estatinas también aumenta el riesgo de hepatopatía y miopatía