Modelización geoestadística de la distribución de carbono en suelo en una dehesa

La mitigación del cambio climático es un objetivo actual y prioritario que la Sociedad demanda de los sistemas forestales. Para mitigar sus efectos es fundamental proporcionar a los gestores y responsables políticos información precisa sobre la dinámica de la situación actual y sobre la distribución de las fuentes y los sumideros de carbono en los subsistemas de los medios de los que son responsables. En un futuro cercano, los mercados de carbono de los bosques pueden requerir patrones espacialmente explícitos de los sumideros de carbono forestales a distintas escalas. La calidad de la gestión y la política de decisiones basadas en el carbono se ven afectadas por las incertidumbres relacionadas con las estimaciones de carbono forestal, por lo que hay una urgente necesidad de mejorar las técnicas de evaluación, calidad de los datos y de los mapas forestales finales de estimación de carbono (Wang et al. 2009). Las dehesas, sistemas silvopastorales de larga tradición de gestión sostenible, capaces de producir bienes y servicios de calidad de forma eficiente pueden, en un entorno de cambio global, variar su dinámica y funcionamiento junto con las demandas que la sociedad pretende obtener de ellos (Roig & Rubio, 2009). La escasez de agua característica de estos espacios hace difícil la producción vegetal y, al mismo tiempo, la acumulación de carbono en el suelo (Roig et al. 2006; M.A.P.A, 2006). Además, a nivel mundial, el stock de carbono orgánico del suelo tiende a disminuir a medida que aumenta la temperatura. Sin embargo, se estima que los suelos de los sistemas agroforestales presentan un gran potencial de almacenamiento de carbono (FAO, 2004; Roig et al. 2006). Con este Trabajo Fin de Carrera se pretende aumentar el conocimiento de los stocks de carbono del suelo en los sistemas agroforestales dehesas, así como cuantificar la captura del carbono, para un mayor conocimiento de su ciclo en el medio Mediterráneo, ya que en esta región se disponen de pocos datos y menos aún, en el caso de sistemas silvopastorales tradicionales como la dehesa, donde se mezclan e interrelacionan múltiples elementos del mundo forestal, agrícola y ganadero. Para ello, se emplean técnicas geoestadísticas que modelizan y simulan la distribución espacial de los stocks de carbono orgánico contenido en los primeros 5 cm del suelo de una dehesa típica de Quercus ilex subsp. ballota del centro de la Península Ibérica. El objetivo principal es generar modelos de predicción de la distribución espacial de los stocks de carbono del suelo que permitan analizar el papel del suelo del sistema agroforestal dehesa en la capacidad que éste presenta para actuar como sumidero de gases de efecto invernadero. Así como también, utilizar dichos modelos como una herramienta de mejora en el diseño de nuevas técnicas de gestión y conservación de estos sistemas agroforestales. Los resultados obtenidos ponen de manifiesto la gran capacidad de almacenamiento de carbono del horizonte superficial del suelo de las dehesas (12,71 MC·ha-1) en relación con el medio mediterráneo. Se comprueba la existencia de influencia del arbolado de las dehesas sobre el stock de carbono orgánico del horizonte superficial del suelo. También, que los árboles son la mayor fuente de heterogeneidad espacial del carbono orgánico de los suelos de las dehesas del centro peninsular. A partir de los resultados se sugiere que una forma de optimizar las prácticas de gestión agrícola, ganadera y forestal, con el fin de reducir emisiones y potenciar la eficacia de los suelos como sumideros de carbono, sería el aumento de la fracción de cabida cubierta de dicho sistema